No solo eliges una taza: eliges un material
La taza, una herramienta cotidiana para todos, ha evolucionado a lo largo de los años. Desde las hechas con piedra tallada y, luego, de cerámica, lo más llamativo de sus cambios son los materiales y las tecnologías que se han venido utilizando para disponer de un elemento tan básico, pero también, tan necesario.
Parece que pasan desapercibidas, pero cuando queremos una para nosotros, aunque nos den igual, las elegimos con atención. Por ejemplo, si en la oficina todas las tazas son iguales, uno ni se lo plantea, pillas la más cercana.
Pero si has elegido TU taza para la oficina, es tuya y solo tuya: ligera o pesada, grande o pequeña, con o sin imágenes, dibujitos, de cerámica, de plástico térmico, de acero inoxidable… ¿De qué materiales están hechas las tazas? Y es que hay algo que suelo preguntarme después del “qué es esto” y del “cómo se hace”. La curiosidad me lleva a la tercera gran pregunta: “¿de qué está hecho?”.
De qué está hecha la humilde taza
El material más popular es la cerámica tratada de diversas formas: cerámica de baja temperatura (como la arcilla), de cerámica de alta temperatura (como la porcelana) o de cerámica de gres. Las tazas de cerámica son duraderas, resistentes y pueden venir en una amplia gama de colores y diseños. Además, retienen bien el calor y son aptas para lavavajillas y microondas.
La porcelana es un tipo de cerámica blanca y translúcida, conocida por su aspecto elegante y delicado. Las tazas de porcelana son livianas, tienen un brillo característico y son ideales para beber té y café. Sin embargo, la porcelana puede ser más frágil que otros materiales y puede astillarse o romperse con facilidad.
El vidrio es otro material común. Las tazas de vidrio suelen ser transparentes o translúcidas, lo que permite ver el contenido de la taza. Es duradero, resistente a los olores y sabores, y fácil de limpiar. Sin embargo, las tazas de vidrio pueden ser frágiles y pueden romperse si se caen o se golpean con fuerza.
Plástico: El plástico es otro material común utilizado en la fabricación de tazas, especialmente tazas desechables. Las tazas de plástico son ligeras, económicas y a menudo se utilizan en eventos o situaciones donde la portabilidad y la conveniencia son importantes. Sin embargo, es importante tener en cuenta que algunas tazas de plástico pueden contener BPA u otros productos químicos, por lo que es recomendable buscar tazas de plástico de alta calidad o preferir materiales más ecológicos.
Qué es una taza térmica
Las tazas térmicas, también conocidas como tazas aisladas o tazas de viaje, están diseñadas para mantener las bebidas calientes o frías durante un período prolongado de tiempo. Suelen estar fabricadas con materiales que tienen propiedades de aislamiento térmico para mantener la temperatura de la bebida en su interior. Aquí hay algunos materiales comunes utilizados en las tazas térmicas:
Acero inoxidable: El acero inoxidable es un material popular para las tazas térmicas y de viaje porque es duradero, resistente a la corrosión. Son resistentes, no retienen olores o sabores, y son ideales para mantener las bebidas calientes o frías durante un período de tiempo prolongado. Suelen tener una doble pared o una pared con vacío en medio, creando una barrera aislante que ayuda a mantener las bebidas calientes o frías por más tiempo. Además, el acero inoxidable es apto para alimentos, no retiene olores o sabores, y es fácil de limpiar.
Algunas tazas térmicas están hechas de plástico con propiedades de aislamiento térmico. Estas tazas suelen tener una doble pared de plástico con un espacio de aire o espuma en medio para ayudar a mantener la temperatura de la bebida. El plástico utilizado en las tazas térmicas suele ser resistente a los impactos y aislante térmico, pero es importante asegurarse de que sea de alta calidad y libre de BPA u otros productos químicos dañinos.
También pueden estar elaboradas con vidrio con propiedades de aislamiento térmico. Suelen tener una doble pared de vidrio con vacío en medio, similar al acero inoxidable, lo que ayuda a mantener las bebidas calientes o frías. El vidrio utilizado en las tazas térmicas suele ser resistente a los impactos y retiene bien los sabores, lo que lo hace una opción atractiva para quienes prefieren beber en este tipo de recipientes.
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